martes, 15 de abril de 2008

En vias del Cambio

Venía pateando el tema para no hablarlo. Cambios. No quería hacerlo, pero me decidí.Qué aventura. Después de mucho tiempo de andar con estos pelos, hice algo por ellos. Ahora estoy distinta. Ahora me peino, aunque no se nota, pero yo me siento re distinta jaja.Cuando el lunes llegué al trabajo, nadie se dio cuenta. Mi hazaña estética, inadvertida. Nadie se avivó del cambio. Ingratos. A mi autoestima, esas cosas no le afectan. Estoy acostumbrada. De adentro o de afuera, mis cambios no se me notan tanto.En mi vida, las transformaciones importantes fueron invisibles pero drásticas. Sin tiempo para pensarlas. Tajantes. Rotundas. Como soy yo. Avasallantes. Son así siempre al principio. En la segunda parte, mis cambios crecen como arbolitos adentro de mi alma. Hacen nidos. Siembran semillas. Prometen cosechas que todavía merecen esperas. Mis cambios últimamente fueron bombas atómicas de Hiroshima. Pero tampoco terminaron. Florecen todavía de viejos chotos que son. De inmaduros que piden risas. Hoy quiero hablarles de mis cambios. Porque yo, no sé ustedes, estoy cambiando. Me estoy reinventado. No sé adónde voy a llegar con tanta transformación que hago. Quizás, a presidenta. Después no digan que no les avisé. En unos años, no se sorprendan.La última vez que cambié, supe que tenía que que aprender durante esta época. Que había que hacerse cargo de que algo andaba mal. Que debía saber que cada uno vive la realidad que se crea. Por eso digo, la última vez que cambié, cambiaron los valores. Necesitaba acomodarlos. Interactuarlos un poco. Volver a pensarlos. Hacer una renovación impecable en la lista desplegable de mis paradigmas superficiales. Entonces, comencé a revertirme. Y me dije Que hacer lo que mi ego demanda no sirve para nada. Que evitar escucharme, sólo me aplasta. Que el orgullo, tan enorme, escondió a mi mejor versión abajo de la cama. Esa que ahora también escribe.Así que para eso estoy. No me voy a cansar de repetirlo. Cambié para aprender a valorar el amor como es y punto. Con su inevitabilidad desgarradora. Con su desesperación silenciosa. Con su muerte aceptable

3 comentarios:

Anónimo dijo...

hay cambios buenos y malos... pero el "cambio" al q vos te referis, es ese ambio q necesita toda persona para seguir en el camino del crecimiento personal, para no morir estancado, "en lo chato".Com todo, tiene sus ventajas y desventajas... no siempre nuestro entorno es el contexto adecuada, y es ahi cuadno comenzamos a reelegir..

Solteracrónica dijo...

Cambios...hicimos tantos...
y este es el momento, ni antes ni despues. Este es nuestro momento de cambiar, de aprender, de surgir, de aprendernos y aceptarnos. De conocernos...

Loquilla, quiero decirte que asi como estas sos grosa. Yo gustaria de vos de ser hombre..jeje...
Pero que cambies no esta mal, el universo esta en constante movimiento y no da quedarse atascado, estancado, esperando que las cosas pasen sin hacer nada por ello. Hay que seguirle el ritmo al universo, sino nos perdemos...

*-* dijo...

amigaa....muy lindo lo que escribiste..está bueno hacer cambios. De hecho, creo que ya lo hablamos y lloramos. Hay cosas que cuando empiezan a adolecer es mejor modificarlas. No funcionan. No te sirven de nada. Y creo que es eso lo que deberías pensar. Creo que un gran cambio en tu vida, sería ese temita que incesantemente está en todos los momentos del día. Fuerzas!. Aunque modifiques algunas cositas nunca dejes de ser lo que escencialmente sos. Cuidate. Besos